Titulo: Recuerdos
Ranking: NC-13
Disclaimer: Es una historia 100% irreal creada por mi loca cabeza, los nombres reales de los protagonistas no me pretenecen y no gano nada con ellos
Autora: Hyukpan
Parejas: YooSu - HyukSu
Tipo: Serial + especial
Warning(s): angst, drama, muerte, terror, sucesos paranormales
Nota: es el primer fic que escribi de este tipo (horror), es como una pelicula de terror :)
R E C U E R D O S
Se dice que aun que la persona muera, el que alguien lo recuerde vasta para que aquella persona siga viva. Ese recuerdo que vive en la memoria queda, es penoso perder las memorias de tu vida, es por eso que comencé a escribir un diario, el cual lleno con todas las escenas mas memorables que me pasan cada día desde que te conocí..
Capitulo I: Primer encuentro
Este día es mi primer día de clases en la escuela nueva, no se que hacer, me siento demasiado nervioso. Siempre me pasa lo mismo, aun que debería estar acostumbrado, con este ya es el 5to colegio al que me cambio en menos de dos años. Según mi madre, ya no nos mudaremos mas.. ojala ahora si sea cierto, pero se que si papa nos encuentra, otra vez nos mudaremos.. es una cacería sin fin...
Quizás mis nervios no son por la escuela, si no por otra cosa. No se porque me miento a mi mismo, si se lo que me pasa, estoy ansioso. Desde el primer día que pise el colegio para dar la prueba de admisión que quede así. Volví a casa animado, esperando a si ser aceptado, todo por algo que vi.. mejor dicho, alguien que vi.
Su nombre no lo se, tampoco se su edad, solo se que es la persona con los ojos mas hermosos y tristes que jamás e conocido, esa mirada llena de melancolía hizo que mi mente se nublara en cuanto pose mis ojos sobre los de el. Simplemente hermoso.. Quede helado en cuanto lo vi, mi madre me tubo que tironear para que siguiera caminando.. patético.. no creo que el me haya notado, pero.. ya estoy aquí, no? Solo falta encontrarte y darme a conocer frente a ti
- Junsu, apúrate con esa leche, ya debe estar fría – mi madre es muy joven, me tubo a los 17 años, quizás por eso me comprende tanto en muchas cosas, es mi mejor amiga del mundo y se que puedo contar con ella para todo, ella ya estaba vestida, lista para ir a trabajar, con una taza de café en sus manos – últimamente andas muy seguido en la luna, te paso algo?
- Nada mama, aun nada – dije con una sonrisa de esperanza en mis labios, deseando que hoy fuera el esperado día del encuentro, haría lo posible por que pasara
- Como es eso que “aun nada”, tienes algo que contarme? – mi madre pone una de esas miradas curiosas, levantando una ceja, esperando mi respuesta
- Eso mama, te lo contare si solo sale todo bien hoy, deséame suerte! – ella sonríe sospechosamente, pero me comprende y me da un beso en la cabeza acariciando con suavidad mi mentón
- Vete ya, no quiero que llegues tarde el primer día – dice golpeándome suavemente el hombro para que me ponga de pie, cosa que hago de inmediato, llegar tarde seria lo peor – recuerda, clase 201, no te equivoques de salón – me grita mientras yo corro hacia mi habitación en busca de mi bolso
- Adiós mama! Te quiero! – le digo antes de salir rápidamente por la puerta de entrada, abandonando mi casa
- Oh! Junsu!! Aishh… se le olvido el bento.. – murmura la joven madre mirando una cajita envuelta en un paño color celeste – bueno, por suerte le di dinero – piensa mientras termina de arreglar las cosas de la cocina para irse a trabajar
El bus de las 7:30 de verdad pasa a esa hora, por suerte lo alcancé a tomar ya que había mucha gente esperando, si llegaba unos minutos después no lo alcanzaba.. al subir, noto que hay mas chicos con mi mismo uniforme, eso me tranquiliza, ya que se que no me equivoque. Mientras avanzo en el bus, comienzo a mirar las caras de mis “compañeros” a ver si las memorizo, quizás me toque con ellos en la misma clase. Me acomodo frente a uno que va sentado mirando hacia la ventana, tiene su mirada perdida, me gusta la expresión de su rostro, se ve inteligente.
Después de media hora de viaje llegamos a la parada, me bajo como puedo, ya que la micro aun esta llena, cuando llego al suelo, trato de estirarme levantando los brazos, pero mi torpeza me supera, golpeando a un chico en el rostro mientras levantaba los brazos
- lo siento!! – digo sonrojado, agachando mi cabeza pidiendo perdón
- gracias, era el golpe matutino que necesitaba – me responde sobandose la nariz
- perdóname, no fue mi intención yo solo me estiraba, no quería golpearte, de verdad, perdóname, soy muy torpe a veces y hago tonteras como esta, enserio discu..
- puedes callarte?! Me tienes mareado! – aparte de mi torpeza, cuando me pongo nervioso no puedo dejar de hablar..
- lo siento.. – murmuro arrepentido, haciendo una reverencia
- esta bien, no fue para tanto, no me sale sangre – dice tocándose la nariz – por lo que veo vas a la misma escuela que yo, eres nuevo verdad?
- S.. si.. – seguía con la mirada agacha
- Pero bueno, no te pongas así tampoco, si te dije que no fue nada – me golpea suavemente el hombro tratando de animarme – como te llamas?
- Kim.. Kim Junsu..
- Junsu.. no te molesta que te diga así verdad? – me niego con la cabeza – bueno, mi nombre es Lee Hyukjae, mucho gusto Junsu sshi.. ahh... que edad tienes? No eres mi hyung verdad? Con esa cara de bebe que tienes
- Tengo 17..
- Ahh mira tu! Yo también! Vamos! Caminemos juntos, se nos hará tarde si seguimos haciendo vida social aquí en la parada de autobús – me dice sonriendo, sosteniéndome del brazo para hacerme caminar
Caminamos unas cuantas cuadras y llegamos al establecimiento, no se porque ahora me parece mas grande que la primera vez que vine..
- En que clase estas? – me pregunta mi nuevo “amigo” sin dejar de sonreír
- 201.. mmm.. si 201 – le digo un poco inseguro
- nooo! Esto es el destino! Yo también voy en esa clase! Estas de suerte, has conocido al mejor chico de toda la escuela – Hyukjae parece un chico agradable, lo bueno es que no me golpeo por haberlo golpeado.. ojala no se desquite luego..
- es muy extraño.. – murmuro riendo disimuladamente tapando mi boca con la mano
- vamos, ojala nos toque en el mismo asiento, sabes.. presiento que seremos muy buenos amigos, que dices? Amigos? – se para frente a mi con su mano estirada, sin dejar de sonreír
- amigos – respondo feliz, primer día y ya hice un amigo.. - sonara extraño, pero yo también creo que seremos buenos amigos – le digo sonriendo también
- ahora, vamos. Nos toca matemáticas ahora y ese profesor no es muy “lindo” que digamos – me vuelve a tomar del brazo y caminamos juntos hasta el salón 201, yo no dejaba de mirar hacia todos lados, buscando a ese chico especial que vi el primer día, pero no lo encontré afuera, en los pasillos – hola a todos!.. menos a uno – dice Hyukjae saludando alegremente, veo que algunos chicos le responden igual de alegres y otros no tanto, todos fijan su vista en mi, cosa que hace que mi rostro se tiña de rojo – ah! el es un nuevo compañero, lo tratan bien o se las verán comingo eh! – intento saludar, pero las palabras no salen de mi boca, así que solo hago movimientos con mi mano, saludando a todos – si, es un poco tímido – dice Hyukjae mirándome fijamente con una mueca en la cara
- bien chicos! Todos a sus puestos! – un hombre alto de presencia fuerte entraba al salón lanzando el libro de clases sobre su mesa, causando un gran estruendo – me dijeron que tengo juguete nuevo – dice mirando a todos fijamente, divisándome en un asiento junto a Hyukjae – tu – apuntándome – eres el nuevo, no es así? Porque no pasas y te presentas para que te conozca
una vez mas siento todas las miradas sobre mi, Hyukjae me da palmadas en la espalda, animándome a ponerme de pie, camino lentamente hasta el lado del profesor, sin subir la mirada, su sola presencia ya me daba miedo y el acordarme lo que dijo mi nuevo amigo sobre el, mas me aterraba
- bien muchacho, cuéntanos sobre ti – dice el profesor, fijando su mirada en mi
- m.. mi.. mi nombre es Kim Junsu, vengo de Seúl.. tengo 17 años, vivo solo con mi madre y no tengo mas hermanos, un placer conocerlos a todos – digo haciendo una reverencia, sin dejar de mirar el suelo
- así que de Seúl.. un chico de ciudad.. bueno, quizás Hyukjae ya te hablo de mi, pero si no, te lo digo yo. En mi clase nadie habla a menos que yo lo autorice, no se puede comer, reír, cantar ni jugar, si te sorprendo haciendo algo de eso, te vas de inmediato a conocer la oficina del director, entendido? – su tono de voz era pesado y firme, inspiraba miedo aun que pareciera que estuviese hablando suavemente..
- si profesor – le respondo sin mirarlo
- espero que si sea cierto, ahora ve a sentarte, pero no junto a Hyukjae, en mi clase te sentaras en otro lado, ese chico es mala influencia.. a ver, donde te siento.. – murmuraba el profesor mirando hacia todos lados – ah! ahí hay un puesto libre, frente a Yoochun, siéntate ahí – dice apuntando hacia el lado opuesto de donde me había ubicado en un principio.
Camino hasta donde estaba mi puesto y tomo mi mochila, Hyukjae me guiña un ojo murmurando un “nos vemos después”, yo asiento con la cabeza y comienzo a dar la vuelta para irme a mi nuevo puesto, paso mi mirada por todos mis nuevos compañeros, nunca antes los había visto, hasta que llego a mi nuevo puesto, solo miro las manos de mi compañero que se sienta detrás de mi “supongo que el es Yoochun” pienso sentándome en el asiento vacío, sin mirar a quien esta detrás de mi, pero si notando que el me miraba fijamente.
Toda la clase sentí la mirada de el sobre mi nuca, como una molestia constante, pero no podía girarme a mirarlo, si lo hacia, el profesor me mandaría donde el director, el primer día de clases y esa no seria una muy buena noticia para mi madre. Primer día y ya me llaman la atención por desobedecer una orden directa.
La clase se hizo eterna, como me emocione al escuchar la campana del primer descanso, hasta respire aliviado apoyando mi cabeza sobre el banco para descansar, demasiada presión, cierro los ojos y siento una brisa en mi rostro, alguien paso a mi lado, quizás mi compañero que se sienta detrás de mi.
- Junsu! Que te dije? Ah? que te dije? Es un demonio este profesor no es así? – Hyukjae venia hasta mi todo alborotado, sentándose en el puesto vacío delante de mi
- Me llego a doler la cabeza, si que esta denso el ambiente con el en la sala – le digo sin levantar la cabeza del banco, pero si con los ojos abiertos
- No quieres ir a comer algo? – me dice sonriendo, sosteniéndome de los brazos, levanto lentamente mi cabeza para mirarlo a los ojos, recién eran las 11am y ya mi estomago me estaba pidiendo algo de comer..
- Me leíste el pensamiento – le digo con una sonrisa
- Ja! Ya, vamos.. – se pone de pie y me hace levantarme también, el descanso era de 20 minutos por suerte, el colegio era demasiado grande, tardamos 5 en solo llegar a la cafetería.. estaba casi llena, y eso que aun no era el horario de almuerzo – que quieres comer? Yo invito – dice hyukjae colocándose en una fila
- Emm… leche estaría bien, así me despierto para la siguiente clase – digo mirando para todos lados, aun debía buscar a aquella persona…
- Leche y galletas entonces… - dice hyukjae volteando a mirarme – busca una mesa por mientras, así haces algo por la vida – me dice riendo, yo también me río mientras me volteo a buscar una mesa
Camino por los pasillos que se forman con las mesas y sillas, buscando 2 asientos vacíos, llego hasta casi un rincón del lado derecho, ahí diviso puestos vacíos. Me siento en uno y observo hacia la fila, hyukjae ya estaba pagando las cosas.
Me recuesto sobre la mesa unos momentos para recordar aquella mirada que vi ese día, pensando que quizás hoy no seria el día en que lo volvería a ver… quizás el destino aun no me quiere ayudar…
- hay no! – exclama hyukjae cuando llega hasta donde estoy – de todas las mesas que existen en esta cafeteria tenias que escoger esta?! – me dice en tono alterado, yo lo miro confundido, el mira hacia el lado haciéndome mirar también… en la mesa de junto, justo ahí, lo vi otra vez… sus ojos se posaban sobre mi, aun que su mirada era de indiferencia, seguía con esos ojos tristes que vi aquel día, aquellos ojos que ahora me miraban fijamente.. quizás por el escándalo que estaba haciendo hyukjae – vamonos, busquemos otra mesa – dice hyukjae tomándome del brazo
- pe.. pero porque?? – digo alegando mientras me ponía de pie de golpe – que tiene esta mesa??
- Que, no ves acaso?? – dice hyukjae alterado apuntando hacia el lado, yo vuelvo a mirar y lo veo otra vez, pero el ya no me estaba mirando, estaba con su vista perdida en una caja de leche
- No veo nada.. – murmuro volteándome a mirar a hyukjae, el solo suspira frustrado y me tironea a otra mesa, alejándome de mi ensueño.
Me siento frente a hyukjae, para poder seguir mirando a aquel chico solitario, hyukjae bebía su leche enfadado, aun no me decía el porque de tanto alboroto
- que pasa hyukjae? – le digo intentando entender algo
- aléjate de el, trae mala suerte – dice sin mirarme y con tono de enfado
- a.. a quien te refieres? – digo mirándolo fijamente
- a ese pesado de park yoochun, ese maldito a traído problemas desde que entro a esta escuela
- pa.. park yoochun?! – mis ojos se abren como platos.. es el nombre del compañero que se sienta detrás de mi… mi corazón se detiene unos segundos…
- junsu?.. junsu estas bien? Te pusiste blanco.. – dice hyukjae pasando una mano por frente a mis ojos volviéndome a la realidad
- nada! Nada.. – digo mirando hacia la mesa donde estaba aquel muchacho… pero ahora la mesa estaba vacía…
- junsu, vamos, las clases ya van a comenzar – hyukjae se pone de pie y yo lo sigo, parezco zombi caminando detrás de el, no dejando de pensar en su nombre y aquella brisa que sentí cuando paso a mi lado…
entramos al salón y busco mi puesto con la vista, pero el no había llegado aun, mi corazón estaba agitado, tendría que sentarme por el resto del año frente a el?? Me tendrá que hablar algún día, eso espero…
- junsu! Camina!! Que te pasa? Estas como ido – hyukjae me tironeaba un poco para que entrara al salón, lo cual hice de inmediato, casi corriendo me senté en mi puesto y me eche sobre el banco “trae mala suerte”… recordé las palabras que mi amigo me había dicho.. que habrá querido decir con eso?. Hyukjae me miraba desde su puesto con un signo de pregunta pintado en su cara. La siguiente clase era de lenguaje
Veo como el profesor ingresa al salón lentamente, me volteo a mirar el puesto de detrás de mi, pero lo veo vacío.. yoochun aun no llega… yoochun… que lindo saber su nombre al menos.
Las clases comienzan y mi ensueño no aparecía, pero a nadie parecía preocuparle, ni al profesor cuando paso la lista y ver que no estaba… debe ser común que se salte las clases.
En toda la hora apenas si ponía atención a la clase, pensando en el porque yoochun no había llegado o el porque nadie se preocupaba de el. Había algo que yo debía enterarme?... creo que interrogare a hyukjae mas tarde.
- bueno chicos, espero que hoy si hagan sus tareas, mañana las revisare y pondré unos a quienes no las tengan, esta claro? – dice el profesor enfatizando lo ultimo que dijo – ok, quedan libres hasta que suene la campana del almuerzo – dijo sentándose en su escritorio para revisar unos papeles
Yo me quedo mirando la pizarra fijamente unos segundos, perdido en mis pensamientos no sintiendo que hyukjae estaba a mi lado riendo por la expresión que tenia en la cara
- bobo… – susurra en mi oído haciéndome retroceder y pegarme a la pared del susto – ahahaha!!! Te asuste!! – decía riendo a carcajadas, yo lo miro con cara de enfado pero luego me largo a reír también, era demasiado divertido estar con el
- no lo vuelvas a hacer – le digo en tono serio
- ok ok… - dice poniéndose una mano en el corazón – vienes a comer conmigo? – lo observo unos segundos… quizás podría aprovechar esta hora para buscar a yoochun, después de todo somos compañeros y si los demás no se preocupan por el.. yo si
- no… creo que recorreré la escuela, no me quiero perder – le digo sonriendo
- pero bobo! Estas conmigo, como te vas a perder – dice revolviéndome el cabello
- y si tu llegas a faltar? Que hago yo? No quiero depender de nadie – le digo molesto, arreglándome el pelo
- huuuuy que sentimental te me pones – dice poniendo su mano en mi hombro – esta bien, ve solito, si te pierdes sigue el camino amarillo jajaja! – se va a su puesto riendo.
La campana suena y yo salgo apurado, pero me detengo en la puerta… no se donde buscar… comienzo a caminar por el pasillo, hacia el otro lado de donde estaba la cafetería. Muchos alumnos pasan a mi lado, caminando hacia la cafetería. Sigo hasta el final del pasillo y llego hasta unas escaleras. Las salas de clases que habían ahí estaban desocupadas, parecía un colegio abandonado desde este punto de vista. Las escaleras suben y bajan… después de mirarlas un momento, decido subir, si no encontraba nada arriba, bajaría… aun me quedaba mucho tiempo. Al subir encuentro otro pasillo, si fuese de noche, estaría muerto de miedo. Todo parecía desabitado, un silencio enorme reinaba. Apretó mis manos y comienzo a caminar por el pasillo, preguntándome el porque no ocupaban estas salas. Una me llama la atención en particular. Afuera tenia un cartel que decía “salón de música”. Camino hacia aquella puerta lentamente, mi corazón se aceleraba sin motivo alguno. Abro suavemente la puerta tratando de no emitir ningún sonido que arruinara aquel silencio que reinaba. La primera imagen que veo, es un piano de cola enorme, de color negro intenso, una sonrisa escapa de mis labios al verlo. Es mi instrumento favorito.
Ya cuando la puerta se abrió completamente entro, pero al primer paso que doy me quedo estático, una silueta estaba frente a la ventana, la cual estaba abierta. Corría viento y las cortinas se elevaban suavemente. Veo como aquel joven abre los brazos, la vista que daba era hermosa, su figura era delgada y su pelo negro se mecía con el viento. Un escalofrió corre por mi espalda al verlo dar un paso al frente, la ventana no tenia barrotes…
- yoochun! Nooo! – grito sin pensarlo corriendo a detenerlo, mis brazos rodean su cintura deteniéndolo momentáneamente, pero luego el cae sobre mi, botándome al suelo con el encima, mi corazón latía como loco, observo su rostro con dificultad, estaba con los ojos cerrados. Un dolor angustiante se posa en mi pecho, las lagrimas comienzan a brotar lentamente de mis ojos… como un ser con unos ojos tan hermosos puede pensar en quitarse la vida… me pregunte mientras lo quitaba de encima mió con cuidado, observándolo “dormir”. - Yo te rescatare, de aquella amargura con la que cargas. Lo prometo… - susurro acercando mis labios a los suyos, robándole un calido beso… el primero de muchos que luego vendrían…
fin del primer capitulo
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