Titulo: Darkness Eyes if you let me i will live only for you
Ranking: PG
Disclaimer: no tengo el dinero suficiente como para comprarme sm T_T
Autora: Saku / Hyukpan
Tipo: Serial
Warning(s): ninguno, por ahora ^^
Personajes
Estos personajes aparecen en los primeros capitulos, si agrego mas (mas adelante), hare un perfil para ellos tambien ^^
Darkness Eyes
if you let me i will live only for you
Prólogo
Lentamente veo como la vida se va de mis manos sin control, todos la manejan menos yo y es a mi a quien pertenece. A nadie mas que a mi.
Pero así es el mundo de la industria de la moda, si no te comportas como muñeca muda no triunfas en nada, eso es lo que me dijo mi representante al momento de tomarme bajo su cargo.
“maquillaje aquí”, “un poco de fijador acá”, “que buena chica eres, ni comparada con las demás modelos” es lo que escucho la mayor parte del día. Yo no quería esto para mi.
Muy joven decidí meterme en este mundo, por recomendación de varias personas que encontraban mis rasgos exóticos y perfectos para posar frente a una cámara, y lo logre. Pero entre aquí por otra cosa, me sentía sola y pensé que quizás siendo alguien mas lograría encontrar un equilibrio en mi vida, pero me equivoque.
- sohee, cambia esa cara o tendremos que tomar todas las fotografías de nuevo – dice el fotógrafo kim, el tercero del día
- lo siento – susurro colocándome de nuevo en una pose mejor y de paso colgando una mascara frente a mi rostro fingiendo ser feliz
- así! Perfecto! Ahora coloca una mano detrás de tu cabeza, muy bien!
Dos horas de flash tras flash decidieron dejarme descansar, solo porque sentían hambre y las fotos habían quedado “perfectas”, ya detesto esa palabra
- Sohee no comas eso, recuerda que tienes que mantener tu peso para el desfile de la semana que viene – me recordó mi manager, prácticamente arrebatándome la comida de las manos – ten, bebe agua – dijo pasándome un vaso con agua mineral sin gas
Tome el vaso dándole las “gracias” pero por dentro la maldecía y le deseaba lo peor para su vida. Me senté en el suelo cerca de una pared helada, el contacto con esta fría superficie hizo que mi cuerpo temblara, hacia tiempo que no sentía escalofríos, la ultima vez fue cuando conocí a mi actual novio. La primera vez que tomo mi mano supe que estaríamos juntos por mucho tiempo y así fue. Aun que todo haya cambiado ahora.
- Sohee no te sientes en el suelo, arruinaras el traje – mi manager venia hacia mi con cara de enfado – que te pasa hoy que estas tan desobediente y despistada? Tu no eres así – dijo tomándome del brazo para levantarme – menos mal que no le paso nada
- en unos minutos mas comenzaremos nuevamente – dijo el fotógrafo llevándose otro pedazo de lo que comía a la boca
- gracias! – exclamo mi manager sonriéndole – muy bien, necesitas algo? Mira que cuando comencemos con la segunda parte no pararemos hasta la noche
- baño – dije pasándole mi vaso aun lleno de agua
- ok, deja te acompaño – dice ella dejando el vaso sobre una mesa cerca
- no, puedo ir sola, no te preocupes – dije sonriéndole forzadamente dándome vuelta para alejarme de ella. Tenia ganas de correr y eso hice
Corrí y corrí lejos de todo esto, aun con esa ropa horrible que me hicieron usar para las fotos que apenas cubría las partes mas morbosas de mi cuerpo. Aun con ese peinado tan elaborado que llevo horas en armarse.
Llegue a la puerta de salida respirando agitadamente, el guardia me miro de pies a cabeza imaginando una infinidad de cosas, según creí. Saque un abrigo que vi colgado cerca y me lo puse antes de salir de aquel estudio. Por suerte el abrigo tapaba la mayor parte de mi cuerpo y no llamaba tanto la atención, solo lo hacia mi extraño peinado y maquillaje.
Quería escapar de todo, pero no sabia donde ir ni que hacer.
Un par de minutos después de que me fui de aquel estudio llegue a una azotea de un edificio, tanto caminar me llevo al lugar mas alejado de la ciudad. No tenia dinero, comida ni techo para descansar, pero por primera vez después de muchos años me sentía libre.
-
La manager después de esperar unos minutos decidió ir a buscar a su modelo, había estado pendiente constantemente de la hora “quizás los laxantes que le di ya le surtieron efecto” pensó al ver que pasaban 15 minutos exactos desde que había dicho que iría al baño.
Llego al baño del estudio y entro sin golpear, siempre lo hacia.
- Sohee.. – dijo al entrar pero quedo en shock al ver que no había nadie adentro – quizás ya se fue de vuelta al estudio – murmuro saliendo nuevamente, dirigiéndose al estudio principal
En cuanto llego le pregunto al fotógrafo por ella, pero no la había visto, nadie del staff la había visto.
- no otra vez – susurro dejándose caer desplomada sobre una silla
-
La luna llena iluminaba los rincones oscuros de cada azotea de aquella ala de la cuidad, se veía mas grande que otras noches y mas brillante y hermosa que nunca. Una silueta apareció por las escaleras de un edificio, iba rumbo a la azotea de su edificio con un instrumento colgado de su cuello brillando de vez en cuando al contraste de la luz.
No hacia frío esa noche, y estaba perfecta para interpretar una dulce melodía bajo la luz de aquella luna llena.
Llego a la azotea respirando profundamente, era su lugar especial en donde nadie lo molestaba por el ruido. En donde podía perderse en sus pensamientos sin esperar alguna llamada inesperada comunicándole que lo necesitaban en el trabajo. Era la azotea de su edificio, suyo propio ya que era el dueño de este.
Se acomodo en el centro, mirando de cara a la luna, sintiendo como un cosquilleo llegaba hasta sus dedos al acomodarlos sobre las teclas de su saxofón. Sonrió suavemente antes de soplar la primera melodía, un poco baja para su gusto. Pero luego comenzó a sentir esa inspiración que le bajaba cada vez que la música tocaba su corazón.
Mientras la dulce melodía del saxofón impregnaba la noche con su sonido, una silueta diferente se movía en un rincón, despertando. El ruido de la música le hizo abrir los ojos asustada recordando de golpe lo que había hecho.
Decidió incorporarse y caminar hacia una cabina telefónica para reportarse, pero la melodía del saxofón la detuvo en seco, quedándose inmóvil escuchando atentamente. Un sin fin de sensaciones diferentes la recorrieron por completo. Jamás había escuchado la música interpretada por un saxofón, jamás había hecho muchas cosas en su corta vida.
Observo atentamente la figura de aquel joven que interpretaba la melodía, se veía delgado y alto desde su perspectiva. Supo que era hombre por la forma de sus hombros, aun que su cintura le hizo dudar unos momentos. En una nota en especial aquel sujeto se coloco de lado iluminando el perfil de su rostro y un poco de sus facciones.
La joven sintió que su corazón se detuvo unos segundos, aquella imagen era digna de un cuadro.
Sin querer dejo escapar un suspiro de emoción, tapando su boca al instante. Pero en cuanto lo hizo la música dejo de ser interpretada
- quien anda ahí? – pregunto el joven dándose vuelta asustado, intentando mirar entre tanta oscuridad
- lo.. lo siento – susurro la joven poniéndose de pie lentamente – no fue mi intención interrumpirte – dijo acercándose un poco hacia la luz
- quien eres y que haces aquí? – pregunto molesto caminando hacia ella, odiaba que lo molestaran mientras tocaba el saxofón
- no soy nadie y ya me voy – dijo la joven dirigiéndose hacia la escalera para bajar. El joven la observo detenidamente, ya su cabello complejamente peinado caía sobre sus hombros lacio y liso como siempre. Aun su rostro estaba maquillado con tonos amarillos y verdes. Se fijo que traía un abrigo de hombre muy grande como para ser de ella.
- espera! – grito ya cuando la joven había descendido 3 pisos – espera te digo! – grito aun mas fuerte bajando por las escaleras persiguiéndola
La joven acelero su paso sintiéndose descubierta, necesitaba llegar a una cabina telefónica lo antes posible. En cuanto sus pies tocaron el suelo corrió hacia una dirección x, perdiéndose en una curva. El joven cuando llego al suelo corrió hacia esa misma dirección pero no supo hacia donde girar. Por algún extraño motivo necesitaba encontrarla.
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Corrí y corrí nuevamente, huyendo de aquel edificio y de aquella extraña sensación que sentí al escuchar aquella melodía que interpretaba el.
Me detuve cerca de una tienda 24/7 oliendo un rico aroma a comida recién hecha. Mis tripas sonaron al instante, no había comido nada desde la mañana y ni agua había bebido hace horas. Decidí seguir caminando en busca de la maldita cabina telefónica. Seguramente me castigarían haciéndome trabajar el doble, pero no me ya importaba.
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El teléfono de su bolsillo comenzó a vibrar asustándola, respiro aliviada al ver el numero desconocido que llamaba.
- donde estas? – fue lo primero que dijo al contestar
- no lo se… – respondió una voz cansada y tan triste como siempre
- algún nombre de calle para ir a recogerte? – pregunto ya menos enfadada
- xxx es lo que dice un letrero frente a la cabina en que estoy
- ok, no te muevas de ahí, iré enseguida – cuelga
Tomo las llaves del auto que estaban sobre su escritorio respirando mas aliviada, después de todo no era la primera vez que lo hacia.
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La luz de los faroles en la calle iluminaban mi rostro de cuando en cuando, miraba por la ventana hacia ningún lugar en particular. Me sentía cansada, hambrienta y desesperanzada. Es que no había un lugar en este mundo solo para mi? Ya me canse de pensar que si.
- Tendrás que trabajar el doble para pagar lo que hiciste hoy – dijo mi manager que iba a mi lado manejando – y de paso pagar ese costoso traje que ahora usas y que esta arruinado
Yo no decía nada, y ni siquiera la miraba. Sabia que no me negaría a nada de lo que me dijera que haga de ahora en adelante, no por culpa si no por obediencia, después de todo me habían acostumbrado así.
Al llegar al departamento me metí directamente a la ducha, quería quitarme todo el maquillaje y los químicos que habían puesto en mi cabello y de paso borrar el rastro de las lagrimas que caían rodando por mis mejillas haciéndome sentir miserable. Bajo el sonido del agua que caía recordé aquella melodía que interpreto el joven sobre la azotea. Era tan sobrecogedora e inspiradora. Sentía que mi corazón se aceleraba al recordar aquella escena de su perfil contrastado con el resplandor de la luna. Golpee mi frente contra la pared de la ducha. Jamás lo volveré a ver.
- Sohee sal de la ducha, no quiero que te resfríes – dijo mi manager entrando al baño con una toalla gigante. Cerré la llave y abrí la cortina, sintiendo como sus brazos me envolvían con la toalla – espero que sea la ultima vez que hagas esto, terminaras arruinándonos a ambas – dijo frotando mi espalda con la toalla mientras yo ponía otra sobre mi cabello mojado – termina de vestirte y te vas a la cama, mañana tenemos trabajo por la mañana – dijo antes de salir del baño dejándome un pijama limpio y cremas varias para cuidar mi piel de porcelana que le daba tantas ganancias, monetariamente hablando.
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En el otro lado de la ciudad, aquel joven camino otro par de minutos hasta que decidió volver a su departamento. No la encontraría de nuevo, no de noche o no esta noche.
Entro a su departamento dejando su saxofón dentro del estuche con cuidado. Un pequeño perro llego hasta el agitando su cola alegremente, saludándolo.
- hola bobo, me extrañaste? – dijo agachándose para tomarlo – sabes que no puedes subir a la azotea conmigo o si no te llevaría, pero con lo loco que eres quizás termines.. muerto.. hmm.. mejor olvidemos eso – murmuro pasando una mano por su rostro que había palidecido unos momentos – veamos quien llamo mientras no estaba – dijo presionando la tecla play de su grabadora, luego de rebobinar la cinta
“yunho donde estas?, ya subiste a la azotea verdad? Sabes que siempre te llamo a esta hora, para mi que lo haces apropósito para no hablar conmigo” dice una voz un tanto chillona “mañana recuerda que tienes que venir a la oficina temprano si no quieres que nuestro padre te mate por faltar tantos días, eres el jefe de la empresa después que el y no es bueno que te ausentes tanto” deja escapar un suspiro “bueno hermano, que duermas bien y deja de soplar tanto esa cosas que se te va a salir el cerebro” dijo riendo sonoramente “bye~” cuelga.
- aigo.. mañana temprano? Mejor me acuesto a dormir ahora. Perdí muchas horas buscándola.. me pregunto quien seria.. – murmuro hablándole a la nada, mientras se sacaba la ropa para acostarse a dormir – la veré de nuev~ o?.. – dice bostezando, dejándose caer sobre la cama – espero que si... – murmuro antes de cerrar los ojos quedándose dormido al instante
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