Capitulo 7
Este día sábado había quedado con Sungmin para ir de compras, después de clases nos pusimos de acuerdo.
Pase a buscarlo, caminando, ya que a el no le gusta “usar” los lujos que poseo. Como un chofer propio.
Luego de llamar un rato en su casa, veo a Sungmin salir corriendo de la puerta con una gran sonrisa.
- mi madre me dio mi mesada! – dice emocionado, casi aplaudiendo
- me alegro por ti, ya te la debía del mes pasado
- si!! Ahora tengo dinero de sobra para comprarme esa chaqueta que vimos la otra vez! – decía sonriendo. Puedo jurar que vi un par de lagrimas asomarse. – vámonos ya!! – dice tomándome del brazo, arrastrándome hasta la parada del autobús.
Nos tomaba unos 10 minutos ir al centro comercial en mi automóvil. En autobús nos toma 30… casi 40 minutos. Sin mencionar los empujones y el mal olor de las personas que lo suben, pero no podía hacer nada. A Sungmin le gustaba tomar el autobús conmigo.
A penas subimos nos sentamos, yo a la ventana esta vez. El viaje iba a ser largo, así que Sungmin saco su mp4 y me paso uno de los audífonos, colocándose él el otro.
- fuiste feliz ayer? – me pregunto, mientras cambiaba las canciones buscando una que le gustara
- ayer? Por que?
- No estuvo Lee Bom en la escuela, pudiste acercarte mas al profesor, o no? – dejo escapar un bufido de molestia recordando el día anterior. Había sido un martirio
- Sabes que no! No estará esa bruja maldita pero dejo a su secuaz! Ese travesti mal operado!! – exclamo enfadada, llamando la atención de algunos pasajeros, pero poco me importo
- Ya, ya relájate. Respira profundo
- Cada vez que me iba a acercar a mi amado profesor aparecía ese desgraciado con el teléfono pegado en la oreja diciendo ”Lee Bom”. el profesor corría a su lado para hablarle. Aish!! Maldita bruja! Me pena aunque no este en la escuela! – decía cruzándome de brazos, mirando por la ventana. Acaso el profesor se sentía mas atraído por esa bruja que por mi? – no, no puede ser – murmure golpeándome la frente sonriendo
- Que pasa? – pregunta Sungmin mirándome extrañado
- Es imposible que esa bruja tenga mas ventaja que yo sobre el profesor Lee, verdad? – miro a Sungmin y el solo sonríe
- Tu eres mucho mas linda – dice sonriéndome mas ampliamente
- Mas te vale que digas eso – digo, haciendo a Sungmin reír a carcajadas
- Yo creo que el profesor Lee se preocupa por Lee Bom por que es una revoltosa. – dice Sungmin pensativo – he notado que esta en la naturaleza del profesor el preocuparse excesivamente por sus alumnos y como ella es problemática, el profesor centra mas su atención en ella.
- Entonces tendría que ser una andrajosa como ella para que el me preste la misma atención? – pregunto asustada, Sungmin me mira sorprendido
- No!! Ni lo intentes tampoco, el profesor ya se fija lo suficiente en ti. No te has dado cuenta?
- Pero no soy su centro de atención, cuando escucha el nombre de esa maldita corre! Me deja botada!! Solo acordarme de cómo me dejo con la palabra en la boca ese día me exaspera! – dije empuñando las manos, molesta
- Yo creo que tienes que seguir como vas, el profesor se dará cuenta de que con Lee Bom pierde su tiempo – decía Sungmin mirando su mp4
- Sungmin… de cuando esta actitud tan positiva acerca de mi gusto por el profesor Lee? – le pregunto sorprendida
- Va! Que acaso ya no te puedo apoyar ahora? No es eso lo que hacen los amigos?
- Pero… me sorprendes, no hace mucho me criticabas y me decías todas las cosas que tengo en contra-
- Yah! Cambie de opinión de acuerdo?! Y fin del asunto – dice cruzándose de brazos mirando hacia otro lado. Yo río divertida, me alegraba saber que mi mejor amigo al fin asumía el hecho de que el profesor Lee era mi hombre ideal.
Me apoye sobre su hombro acomodándome, aun quedaba un poco de camino para llegar a nuestro destino.
Una mano sobre mi rostro me despierta, era Sungmin que intentaba hacerme reaccionar. Habíamos llegado y yo me había quedado dormida.
- al fin llegamos – dije ya abajo del autobús. Sungmin solo asiente y mira alrededor, había bastante gente
- vamos – dice ofreciéndome el su brazo ahora para que camináramos, yo me cuelgo de el y comenzamos a caminar hacia el centro comercial.
Hacia un día soleado, aun que ya estábamos entrando al invierno. Corría un viento helado, menos mal que el centro comercial tenia aire acondicionado.
De camino hacia allá vimos una multitud de gente reunida cerca de la pileta que estaba casi a la entrada del mall. No alcance a preguntarle nada a mi amigo ya que me llevo hasta donde estaba toda esa gente sin decirme nada. Era muy curioso.
La mayoría de los que estaban ahí reunidos eran mujeres, así que me imagine que algún artista famoso estaba ahí sacándose fotos o algo así. Y no me equivoque
- oh por dios!! – grita Sungmin al llegar a donde estaban las mujeres, igual de emocionadas que mi amigo – es el!!
- Es quien? – pregunto mirando hacia el frente. Podía ver a un joven alto con una ropa muy bonita a metros de mi. Se veía que todas estaban gritando por el
- Es Gabriel!! – lo observo confundida, me estaba hablando en otro idioma – no sabes nada?!! – me dice gritando, asustándome.
- Pero no te enojes, no es mi culpa no conocerlo
- Claro! Como tu mundo gira alrededor del profesor Lee – me dice burlonamente
- Yah! No seas pesado! Y dime que tiene de especial ese tipo? – digo volviendo a mirarlo. Estaba rodeado por unas asistentes que le arreglaban el pelo y retocaban su maquillaje. Se veía que era bastante popular, no tendría esa clase de trato si no lo fuera y desde esta distancia no se veía mal tampoco
- Se hizo famoso en un instante, basto solo una foto en un catalogo y ya es un modelo bastante cotizado. Tengo todas las revistas en la que aparece. Aun que en si, es un misterio de hombre – decía Sungmin emocionado, haciéndome reír
- Parece que te gusta – le dije bromeando, recibiendo un golpe en mi brazo de su parte
- Tu sabes que mi sueño es ser un modelo famoso y el es mi ejemplo a seguir! – dice enojado
- Ya… si lo se, no me golpees – digo haciendo pucheros mientras me sobo el brazo que fue azotado por la mano de Sungmin
- Esta es la primera vez que lo veo en vivo y en directo – dice sonriendo, mirando hacia la dirección donde se encontraba aquel famoso modelo. Yo también lo miro, tenia su aura de misterio aun que también me parecía un poco engreído por la actitud de divo que tenia con respecto a su staff mientras le retocaban la ropa.
Cuando se movió para ponerse en pose para la foto, desato un estallido de gritos por parte de las que mirábamos. Me tuve que tapar los oídos para no quedar sorda. Sungmin parecía encantado por aquel tipo y no dejaba de mirarlo maravillado. Lo seguí mirando, y aun que lo encontraba bastante atractivo algo en el me molestaba.
Decidí salir de aquel tumulto de gente, ya no aguantaba los gritos y quería irme. Arrastre a Sungmin conmigo.
- me duele – dije apuntando mis oídos
- esta bien, entremos ya. Fui feliz por unos momentos – dice mirando hacia donde estaba la multitud aun gritando emocionada.
Entramos al centro comercial, respirando ese aire a nuevo que me encantaba. Visitaríamos varias tiendas de ropa, como siempre, y saldríamos cargados como burros con ropa nueva. Ir de compras era nuestro pasatiempo favorito.
- donde primero? – pregunta Sungmin mirando hacia todos lados mientras caminábamos
- no querías una chaqueta? – pregunte tomándolo del brazo, el asiente sonriendo y nos dirigimos hasta esa tienda de ropa masculina.
Por suerte aun estaba a la venta, así que Sungmin sin pensarlo 2 veces saco su billetera y pago por ella mientras yo miraba el resto de la ropa, imaginando al profesor Lee con ella.
No me había fijado antes que en las paredes estaban pegadas las fotos de ese modelo que vimos anteriormente afuera del mall. Sonreí divertida al ver sus fotos. De verdad que no era mal parecido y sus fotos eran bastante lindas. Con razón Sungmin lo admiraba tanto.
- listo!! – dice mi amigo emocionado con una bolsa en sus manos, ya tenia aquella chaqueta en su poder
- vamos a ver las demás tiendas entonces – digo caminando hacia la salida.
Después de un par de horas caminando y comprando, ya me dolían las manos cargando unas bolsas con ropa que había comprado. Por esa razón también me gustaba venir con mi chofer de compras, así no tenia que cargar yo los paquetes.
- sentémonos ahí un rato – dije apuntando una banca
- ya te cansaste? – pregunta Sungmin, siguiéndome
- claro que si! Te dije que viniéramos con WooJung! – exclame molesta, sobandome las manos
- deja de quejarte tanto, niñita mimada – me decía Sungmin sacándome la lengua, sentándose a mi lado en la banca – podríamos aprovechar para ir a comer algo, así descansas
- esa! Es una idea excelente – le digo sonriendo
- hay no… es que la palabra comida tiene un hechizo? – pregunta Sungmin, confundiéndome. El apunta hacia el frente y veo a Hangeng caminando hacia nosotros seguido por unos tipos
- hola byul-ah! – me saluda al llegar – Sungmin – dice poniendo una mueca burlona, Sungmin solo lo ignora mirando hacia otro lado
- hola hannie, que andas haciendo? – pregunto mirando a los tipos que estaban detrás de el
- paseando. Tu, de compras? – dice apuntando mis bolsas
- si! Y llegas justo a tiempo – digo poniéndome de pie, tomando las bolsas del suelo y pasándoselas – estas muy ocupado? – pregunto mirando a sus acompañantes
- la verdad, no – dice tomando las bolsas que le entregue
- bien, vamos a comer entonces! – digo aplaudiendo feliz. Observo a Sungmin quien me miraba molesto. Sabía que no le gustaba Hangeng, pero no quería seguir cargando mis bolsas, al menos no por ahora. – vamos – le digo extendiendo una mano hacia Sungmin, la cual toma de mala gana.
Todos caminamos hacia el patio de comidas del centro comercial, entrando en un restaurante de mi gusto. Cuando ya estábamos instalados en una mesa, Hangeng nos presenta con sus amigos. Sungmin solo saluda con la cabeza y no pronuncia palabra en toda la comida.
- así que conocen a Hangeng desde la primaria? – pregunto sorprendida, pensaba que Hangeng era del tipo solitario, no me lo había imaginado con una pandilla de amigos
- si, hace bastante tiempo – decía uno de ellos sonriendo
- nos había hablado de ti – dice otro llamando mi atención – pero no nos había dicho que eras tan bonita – dice coqueteándome
- ehh… gracias – respondo haciendo una mueca de asco. No era para nada mi tipo.
- Si! Te la tenias bien guardada, eh? – dice otro mirando a Hangeng sonriendo.
- Con razón no querías que la conociéramos. Pero mira como es el destino, hizo que nos encontráramos en este lugar. – dice mirándome – Y dime, tienes novio? – pregunta tomándome la mano, pillándome desprevenida. Hangeng golpea la mesa molesto, asustándome. El tipo de inmediato soltó mi mano y yo aproveche de limpiarla con una servilleta
- Basta – dice Hangeng enojado, mirando a sus amigos. Estos solo lo miran serios y vuelven a comer en silencio
Luego de unos segundos, volvimos a conversar de cosas más triviales. Hangeng no dejaba de tener esa cara de molestia al mirar a sus amigos. De verdad que eran atrevidos, pero no parecían personas malas. Solo Sungmin acompañaba a Hangeng en la cara de molestia, apenas probo su comida y eso que era su plato favorito.
Ya cuando todos terminamos de comer, pedimos la cuenta.
- amigo, no sabia que tenia que traer dinero – dice uno de los tipos mirando a Hangeng.
- Mira, esto es todo mi capital – decía otro sacando un billete de mil won.
- Creo que nos va a tocar lavar los platos…
- No se preocupen – dije sacando mi billetera del bolso – yo pago la cuenta – digo mirando a Hangeng sonriendo. Ya era costumbre y no me costaba nada invitar a sus amigos también esta comida
- Vaya!! Hangeng! Si que tienes suerte de tener una amiga como ella – decía uno de ellos sonriéndome feliz
- Sii Hyung! Eres afortunado – decía otro palmeando la espalda de Hangeng sonriendo también
- Toma – me dice Sungmin pasándome el dinero de su plato – no necesito que me pagues mi comida, no soy un aprovechador como otros – dice mirando a los amigos de Hangeng enojado
- Min-ah… - murmuro mirándolo, el me pasa el dinero en la mano y yo sabia que no podía rechazárselo. Lo guarde en la billetera, teniéndolo presente para cuando saliéramos del restaurante.
Llamamos al mozo y le pase una tarjeta de crédito para pagar la cuenta. Cuando volvió con el recibo, todos nos paramos y salimos del restorán. Hangeng aun cargaba mis bolsas así que me sentía liberada.
- que les parece si vamos al karaoke! – dijo uno de los tipos, ya cuando estábamos afuera, varios apoyaron la idea.
- Yah!! – grito Sungmin, asustándonos a todos. Fue hasta Hangeng y le quito las bolsas que me cargaba, luego tomo mi mano enfadado – Adiós! – dice despidiéndose de los demás, haciéndome caminar con el, alejándonos de ellos que nos miraban aun confundidos. Sobre todo Hangeng.
Cuando ya estábamos bien lejos me soltó la mano bruscamente, aun estaba molesto y yo confundida. Lo vi refunfuñar y pasearse frente a mi balbuceando cosas sin sentido. Parecía que estaba hablando en otro idioma. Después de unos minutos pareció calmarse. Respiro profundo y luego me miro serio.
- yah! Babo – me dice parándose frente a mi, entregándome mis bolsas de compras – vamos por un helado? – pregunta sonriendo, yo asiento sorprendida. Aun no entendía bien lo que había pasado. Pero decidí no preocuparme por el asunto. Sungmin era una persona complicada a veces, pero no mala.
Caminamos hasta una heladería y compramos unos conos, ambos con cobertura de chocolate. Sungmin parecía haberse calmado así que ambos caminábamos conversando y riendo como siempre.
- ya se!! – digo recordando algo de repente – vamos a esa tienda nueva que queda por allá! – dije apuntando con la mano equivocada la dirección, enterrando mi helado cubierto de chocolate en el cuerpo de una persona que estaba frente a mi. – lo siento mucho! – hago una reverencia avergonzada, ni si quiera había visto el rostro de la persona, tenia miedo de cuan enojada podría estar
- pro-profesor Lee! – exclama Sungmin sorprendido. Me enderezo de inmediato, encontrándome de frente con el rostro de mi amado profesor. Me puse roja hasta las orejas.
- Profesor Lee! – exclamo también, igual de sorprendida.
- Chocolate esta vez? – dice observando la gran mancha que tenia su camisa blanca con rayas grises. Yo vuelvo a bajar la mirada avergonzada, poniendo una mano en mi boca para no gritar como histérica.
- Profesor, déjeme y le ayudo – dice Sungmin acercándose a el con un pañuelo para ayudarle a limpiarse. Vuelvo a mirarlo y veo que en su mano tiene el pañuelo que le di ese día que lo manche con leche de frutilla
- Ese… - digo apuntando mi pañuelo
- Ah… esto – dice el profesor poniéndose nervioso – quería devolvértelo, pero ya ves, me sirve de nuevo con el mismo propósito.
- De verdad, lo siento mucho profesor – digo apenada. Tomando el pañuelo que tenia Sungmin para limpiarlo. Al fin me había calmado. El profesor sonríe cuando me ve intentar en vano sacar esa enorme mancha de chocolate de su camisa.
- Creo que esto no saldrá ni con agua – comenta Sungmin observando la camisa del profesor pensativo. El profesor nos mira sonriendo
- No pongan esas cara, solo es ropa. No es nada del otro mundo – dice apoyando una mano en mi hombro. Yo lo observo atontada, esa sonrisa de verdad es hipnotizante.
- Se me ocurre una idea! – dice Sungmin tomándome del brazo. – ya que HanByul fue la culpable. Que le parece si le compra una camisa nueva? – dice Sungmin sonriéndome
- Excelente idea! – digo sonriéndole de vuelta a mi amigo. Era lo mejor que se le había ocurrido.
- Bien! Decidido entonces! – dice Sungmin mirando al profesor. Este no sabe que decir y ya temía cual iba a ser su respuesta así que lo tomo del brazo antes de que diga algo
- Por favor – le digo mirándolo con cara de pena – déjeme comprarle una camisa nueva, se la debo. Ahora mas aun! Le manche una chaqueta y ahora una camisa. Déjeme compensarlo
- HanByul-sshi… – me dice mirándome a los ojos. Por unos momentos me pierdo en su mirada. De verdad me gustaba mucho el profesor Lee – esta bien – dice resignado, apartando la mirada nervioso, colocando una mano en su rostro
- Si!! Vamos a la tienda donde compre mi chaqueta – dice Sungmin emocionado. Su plan había funcionado para mi y yo también estaba feliz por eso.
- Bien, vamos! – digo dando un paso, aun tomada del brazo del profesor, pero este me detiene
- Espera HanByul-sshi, no podemos caminar así – me dice apuntando mi brazo
- Por que no? – pregunto poniendo cara de inocente
- Alguien nos puede reconocer y con ustedes diciéndome profesor, esto me traería problemas – dice mirándonos de forma seria.
- Hmm… y le molestaría que le llamara oppa? – pregunto mirándolo sonriendo ya que el se había sorprendido al escuchar esa palabra
- Yo podría decirle Hyung – dice Sungmin – así no le traeríamos problemas – el profesor lo piensa unos momentos
- Oppa~ - digo pegándome a su brazo de nuevo – vamos~! Esa mancha no se ve bien en ti~! – le digo poniendo expresiones tiernas, haciéndolo sonrojar levemente
- Esta bien, esta bien. Me convencieron – dice sonriendo – vamos
Yo sonrío feliz, caminaba al lado del profesor Lee tomada de su brazo y tenia su permiso para llamarlo oppa libremente.
Sungmin caminaba unos pasos mas adelante que nosotros, dándome la posibilidad de estar ”a solas” con el. Me sentía en el cielo literalmente.
Sungmin llevaba mis bolsas con el, así que tenia libertad en mis manos.
*************
DongHae se había levantado temprano ese sábado. Apenas había podido dormir y su humor no era el de los mejores.
Había perdido la oportunidad de hablar con Lee Bom en persona el jueves y ayer viernes no pudo conversar con ella tampoco a través del teléfono de Heechul. Se rasco la cabeza con fuerza intentando pensar mientras veía un vaso con leche frente a el.
No sabia que hacer. Y el hecho de que Lee Bom mal entendiera sus palabras lo tenía al borde del colapso. Necesitaba hablar con ella ahora ya!.
Después de ducharse se paseo por su departamento, pensaba en ir a su casa a visitarla, pero quizás la metería en problemas al ser visitada por un profesor. Se volvió a rascar la cabeza con fuerza.
- ya se! – exclamo. Le había venido una idea.
Tomo su chaqueta y las llaves de su departamento, saliendo de este con destino al centro comercial.
Mientras iba en el autobús recordó el día que había visto a su alumna en ese lugar junto a su amigo Heechul, quizás andaban de compras esa vez. La verdad es que no le presto mucha atención. Pero el centro comercial era el lugar indicado donde los jóvenes se relajaban el fin de semana gastando sus mesadas.
Llego al mall emocionado. Presentía que algo bueno le iba a ocurrir y esperaba, cruzando los dedos, que fuera el encontrarse con Lee Bom. Así le explicaría lo que había querido decir con esas palabras y el escucharía su versión de la historia con respecto a su expulsión.
Camino por todos los pisos. Miró tienda por tienda y no encontró a su alumna por ningún lado. Se sentía derrotado.
Decidió comer algo ya que su estomago rugía de hambre.
Después de almorzar, continúo con su búsqueda. No se daría por vencido tan fácilmente.
Caminando por el segundo piso, despreocupado, comenzó a fijarse en los interiores de las tiendas con mas detenimiento esta vez. No encontrando lo que buscaba. Se apoyo en el vidrio de una cruzándose de brazos mientras bufaba de cansancio. Fue ahí cuando escucho una risa mágica, una risa que rara vez la escuchaba, pero que cuando lo hacia, su corazón latía con fuerza. Miro en la dirección de donde provenía esa risa y vio con sorpresa a su otra alumna, HanByul, acompañada por Sungmin. Ambos venían conversando mientras comían un helado. Sungmin al parecer la hacia reír con algún comentario y DongHae inconcientemente reía al verla a ella reír.
Sin pensarlo se puso en marcha hacia donde estaban ellos, quería saludarla y escuchar su voz sorprendida decir “profesor Lee”. Pero para su mala suerte, cuando estuvo a un paso de ella, su brazo donde sostenía su helado con chocolate fue a parar sobre su pecho, enterrándole el helado en su camisa. Se quedo con la palabra en la boca, mirando como el helado se escurría por su camisa, cayendo al suelo manchándolo de café.
Ella se disculpo de inmediato, avergonzada. DongHae solo sonrío sacando el pañuelo, que siempre cargaba, de su bolsillo, el cual pertenecía a HanByul.
Cuando su acompañante lo reconoció, vio con agrado como HanByul se sorprendía y pronunciaba las palabras que quería escuchar. La observa enternecido al ver como se avergonzaba nuevamente, poniendo una mano sobre su boca…
Sungmin le ayuda a limpiarse, sin éxito. Luego HanByul toma el pañuelo de Sungmin y continúa el trabajo. DongHae la observa embobado, olvidando casi por completo la presencia de su otro alumno.
Después de intentar limpiar la mancha sin éxito. Deciden entre ambos comprarle ropa nueva a DongHae. Este se avergüenza enormemente. Solo 3 personas en toda su vida le habían comprado ropa. Su mama, Brian y una ex novia que no valía la pena recordar.
Llegaron a la tienda, HanByul sosteniéndolo del brazo y llamándolo oppa, en eso habían quedado ya que si le decían profesor tendría problemas. Sungmin ingreso primero y se perdió por los pasillos de ropa, dejándolo a solas con su alumna, la cual lo miraba sonriendo y DongHae le sonreía de vuelta. No podía sentirse mas feliz.
- que le parece esta? – pregunta HanByul sosteniendo una camisa celeste en su mano, enseñándosela a DongHae
- me gusta el color – dice este acercándose a ella, tomando la camisa de su mano para observarla.
- O quizás esta mejor – dice HanByul tomando una cuadrille con tonalidades verde agua y celeste. DongHae sonríe observándola más a ella que a la camisa que sostenía. Sentía algo calido en su pecho y daba las gracias mentalmente de que Brian no estuviera ahí con el para burlarse.
- Buenas tardes – dice una vendedora acercándose a ambos – escoge una camisa para su novio? – pregunta dirigiéndose a HanByul, la cual se pone roja. Pero de inmediato recobra la compostura y le sonríe a la vendedora
- Si! – dice la joven sin dejar de sonreír – lo manche sin querer con helado y necesita cambiarse de ropa – dice HanByul dejando a DongHae sorprendido. Había dicho que era su novio? O escucho mal?
- Dígame que busca o acepta sugerencias? – pregunta la vendedora, observando a DongHae sonriendo amablemente
- Hmmm… pues me gustaría ver los últimos modelos que llegaron a la tienda. Supongo que tiene ropa de temporada – decía HanByul hablando con la vendedora.
- Hey! No es necesario que sea lo último de temporada – dice DongHae asustado. La ropa de temporada siempre era la mas cara
- Oppa~! Déjame comprarte algo lindo, si? – dice HanByul volviendo a poner sus caras de niña, derrotando a DongHae por completo
- Esta bien – DongHae suspira bajando la mirada.
- Síganme por aquí – dice la vendedora. Ambos la siguen hacia otro sector de la tienda. Ahí le muestra a HanByul unas camisas exclusivas de la tienda. Ella escoge 4 y se las entrega a DongHae quien va a los probadores para ponérselas.
Cuando esta dentro de la cabina para cambiarse la ropa, respira profundo. Su corazón latía demasiado fuerte a su parecer y temía que se le saliera más de control con todo lo que estaba pasando.
Se puso la primera camisa y luego salio del probador, ya que HanByul era la que tenia que escoger con cual se quedaba. Se sentía nervioso y sonrojado.
Sungmin estaba al lado de HanByul, conversando. Quizás opinaban de cómo se veía el con la camisa puesta o quizás que otra cosa. Eso lo puso aun más nervioso.
- se ve bien, pero los colores son muy oscuros – opino HanByul en voz alta para que DongHae la escuchara – oppa~ la que sigue~! – dice sonriéndole, indicando que se cambiara de ropa.
Así fueron las otras 2 camisas. DongHae ya se sentía todo un ceniciento con HanByul como su hada madrina. ”Brian morirá cuando le cuente esto” pensó colocándose la ultima camisa.
Salio del probador y pudo ver por la mirada de HanByul que esta era la que mas le gustaba.
- oppa!! Te ves muy apuesto! – dice corriendo a su lado, parándose al lado de el frente al espejo que había en la pared. DongHae se observo bien y pudo ver que ella tenía razón. Aun que mas se fijo en lo bien que se veía ella a su lado. Sonrío aun mas cuando HanByul lo tomo del brazo, posando junto a el frente al espejo – oppa, te gusta, verdad? – pregunto ella levantando la vista para mirarlo.
- Eh? Que cosa? – pregunto este confundido, aun tenia su mente en otro lado – ah! Si, si me gusta – dice DongHae avergonzado
- Esta nos llevamos señorita – dice HanByul mirando a la vendedora, que miraba sonriendo a la pareja frente al espejo. Sungmin sonreía también felicitándose nuevamente por su buena idea. – oppa~ no quieres llevar la cuadrille que te mostré al comienzo? Pienso que esa junto con una polera blanca se vería muy bien en ti – dice HanByul soltando el brazo de DongHae, para mirarlo sonriéndole
- No, esta bien con esto. Además quedamos en que me comprarías solo 1 camisa, nada mas
- Pero… - dice ella haciendo pucheros
- Pero nada, solo esta y nada mas – dice DongHae, empuñando las manos para contenerse
La vendedora llamo a HanByul para que se acercara al mostrador. DongHae entro al probador de nuevo, sacando su camisa manchada con chocolate. Tendría que envolverla en algo para luego lavarla o si no simplemente botarla si no salía la mancha.
La vendedora se acerco a su lado y amablemente le pidió la camisa manchada para guardarla, ya que se iría con la nueva puesta. Se la entrego y luego volvió a mirarse al espejo. ”Cada vez que la use me acordare de ella” pensó, mirando a su alumna quien entregaba una tarjeta de crédito a la vendedora para cancelar la compra. Ni si quiera sabia cuanto costaba la camisa y tampoco quería enterarse. Se sentiría mas mal después de saberlo.
Ya terminado todo, salieron de la tienda. DongHae con una bolsa de papel en la mano de la tienda que contenía su camisa manchada.
- alo? – dice HanByul, contestando su celular – no mamá. Estoy con Sungmin por qu- se detiene de golpe mirando a Sungmin, DongHae se acerca a su lado. No tenía buena cara – no mamá. Déjame tranquila – dice colgando el teléfono
- que paso? – pregunta Sungmin acercándose a ella preocupado
- ya sabes, no me dejan en paz – dice HanByul molesta, soltando un bufido. Luego mira a DongHae colocando una sonrisa en su rostro – lo siento mucho oppa, pero me tengo que ir – saca su teléfono de nuevo, pero no lo contesta y este sigue vibrando.
- Esta bien, no te preocupes – contesta DongHae apenado. – gracias por la camisa – dice apuntando su cuerpo
- Gracias a ti por dejarme comprártela oppa – dice HanByul sonriendo.
Ambos se quedan mirando de forma incomoda, DongHae movía lentamente los brazos, haciendo ademán de querer abrazarla. Pero algo se lo impedía. Sungmin miraba a todos lados intentando hacerse invisible. No quería incomodarlos con su presencia, pero sabia que lo hacia aun que no quisiera.
- Ahgassi… - dice un hombre acercándose a la pareja, sacándolos del trance
- WooJung! – exclama HanByul asustada – como?
- Su celular – dice este apuntando el celular de la joven
- Maldición… - murmura esta guardando el celular en su bolso – profesor Lee… - dice mirando a DongHae. El juego había acabado. – nos vemos el lunes – dice haciendo una reverencia. Sungmin hace lo mismo por su lado y ambos jóvenes son escoltados por aquel empleado que DongHae ya había visto antes en el acuario.
- A mala hora se le ocurre llegar – dice DongHae, observando a sus alumnos ya lejos de el. Fijándose en ella en particular.
DongHae se regresa a su casa también, ya no tenia sentido seguir buscando a Lee Bom en el centro comercial. Prefería ir a buscarla donde ella no pudiese escapar y esa era su casa.
Dejo la bolsa que contenía su camisa sucia sobre el sillón y luego fue a la cocina por un vaso de jugo. Mientras lo bebía pensaba en lo ocurrido en el día. Su presentimiento no se había equivocado del todo, si había sido un buen día después de todo. Puso el vaso sobre la mesa de la cocina y fue hasta la bolsa, tendría que lavar ahora su camisa, así no se adhería mas la mancha. Pero cuando la abrió y saco su contenido se encontró con otra cosa que no era su camisa.
Reviso el paquete y era esa camisa cuadrille que HanByul había mencionado junto con un papel. DongHae dejo la camisa sobre el sillón y leyó el papel sonriendo.
”Lo siento oppa~, se que te enojaras al ver que si te compre esta camisa, pero enserio te veras muy bien con ella!. Espero me perdones por tomar tu camisa manchada. La devolveré en cuanto le quite el chocolate… kkkk…”.
DongHae se dejo caer sobre el sillón, tomando la camisa de este observándola.
- creo que tengo una polera blanca por algún lado – dijo pensativo, mirando la camisa y el papel que HanByul había escrito sonriendo.
**********
El Domingo siempre es muy aburrido, mientras revolvía mi closet buscando ropa vieja y en desuso, Heechul me daba los últimos detalles de cómo se llevaría a cabo mi plan de venganza, el cual recaería primero en el ratón de biblioteca.
- Y que te dijo Shindong – le dije mientras hurgueteaba mas a fondo de mi closet.
- Pues sabes que para él no hay imposibles Bom shii~ fue cosa de minutos…
- Perfecto!... – dije cuando por fin encontré lo que buscaba.
- Bom me escuchaste? – dijo mi amigo un tanto inseguro.
- Si te oí!, más vale que todo salga a la perfección!, tienes que levantarte temprano! Nadie en la escuela debe enterarse…
- Pierde cuidado ya te dije como lo haríamos, Shindong sabe cómo hacer las cosas – mi amigo se recostaba en la cama y miraba una foto.
- Yah! Que haces con ella!! – se la quite de inmediato y la metí en una carpeta. – no puedes andar con ella así como si nada!
- Bom!! No seas paranoica estamos en tu casa!!
- Nunca sabes que ojos nos vigilan… le dije mirando de reojo a mi puerta, a la que me acerque y la abrí de golpe. – YaH!! SeungJo! Que haces espiando pequeño enano!!!!
- Yo no espiaba!! – me dijo nervioso, yo me crucé de brazos y lo mire fijamente – bien… yo no escuche nada de lo que van hacerle a un chico mañana y que la escuela no tiene que enterarse porque si no te meterás en problemas y tampoco escuche que te suspendieron… Noona, que hiciste?
- Así que no escuchaste nada de eso – mi hermano negó con la cabeza – pequeño engendro estas muerto!!!!! – le grite mientras lo perseguía por los pasillos y este esquivándome se metió al baño. – Ya verás lo que te pasa cuando salgas de ahí!! – le grite pateando la puerta!
Heechul reía divertido, mientras miraba la escena y regrese a mi cuarto molesta por la intromisión de mi pequeño enano.
- Pequeñajo! Ves lo que te digo! Ni en mi propia casa puedo respirar tranquila!
- Aún no le dices a tus padres que estas suspendida?, no puedes ocultarlo siempre
- Como si a ellos les importara lo que hago!!... con suerte saben que existimos SeungJo y yo. – le dije mientras metía las ropas viejas en una mochila.
- A donde pretendes ir con todo eso…
- Tengo que salir, y ya no necesito todo esto, para que quedármelo?
- Pensé que irías a mi casa – me dice haciendo pucheros.
- Hoy no Chul~ah… concéntrate en lo que tienes que hacer, mira que no quiero sabes de errores te parece?.
- Vale, vale!!...
- Ya esta!! Vámonos! Antes que los militares *mis padres* vuelvan – le dije sonriendo y pasando por el pasillo y al paso golpeé la puerto del baño – SeungJo cuando salgas vas a ver!!!!.... – abrí la puerta principal – SeungJo! Te deje comida, cuidado al calentarla y cualquier cosa ya sabes dónde estoy… te cuidas – susurre mientras cerraba la puerta.
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Donghae se había levantado con un detenimiento, que lo asustaba, despertó tarde, almorzó su ya típico kimchi con arroz. Lavó los trastes sucios acumulados de la semana, se puso la chaqueta se miro al espejo, no se veía tan mal, incluso se atrevió a sonreír, volteo para mirarse de lado y luego de espaldas, una tenida casual, el cabello se le veía bien, o eso pensaba, lo desordeno otro poco, y luego volvió a peinárselo, y volvió a desordenarlo, de repente la chaqueta encontró que no le quedaba bien y se la cambio. Se sorprendió del comportamiento que estaba teniendo, y todo era porque se sentía nervioso por ir a la casa de Lee Bom, “solo es una visita casual, de un profesor a una alumna” se repetía para sí mismo. Sin embargo continuaba pensando que lo que se ponía no se veía bien. Resignado se alejó del espejo si no nunca saldría de casa. Tomo sus llaves y el papel con la dirección de ella y se puso en camino.
Llegar le tomo más tiempo de lo que pensaba, y el barrio quedaba bien lejos de la escuela, ¿por qué ella atravesaba casi toda la ciudad para ir a esa escuela?, cuando recordó que en su expediente decía que había sido transferida ahí después de pasar por casi todas las escuelas de la zona, sonrió para sí mismo, su alumna si que era todo un caso.
Al fin dio con la casa de Lee Bom, era bastante sencilla, ubicado en un condómino de departamentos; se sentía nervioso y le sudaban las manos, tomo aire varias veces antes de pararse frente a la puerta y tocar.
- YA TE DIJE QUE APAGES ESO!!! – se oyó un grito desde dentro. Luego como si un montón de cerrojos se abrieran y finalmente una mujer despeinada y un cigarro en la mano salió – Quien es usted? – dijo malhumorada.
- Perdone… es la casa de Lee Bom… pregunto nervioso, creyó que se había equivocado de lugar.
- Por que? Acaso le debe dinero?!, mire sea cual sea la razón yo no tengo nada que ver así que no moleste! – la mujer estaba a punto de cerrar la puerta.
- No, no me debe nada… soy... yo soy su profesor.
- Profesor??
- Entonces si es la casa de Lee Bom
- Si, ella vive aquí, no cree que es demasiado joven para ser profesor – la mujer lo miro de pies a cabeza en señal de desaprobación.
- Verá me gustaría hablar con ella, no pude hacerlo después de la suspensión..
- Que??...suspensión? – la mujer echaba humo por la boca mirando incrédula.
- Em… ella no le dijo que la… - no fue capaz de terminar la frase, porque por el rostro de la mujer se veía que no sabía nada.
- Esa… - la mujer volvió a fumar y boto el humo antes de seguir – Mire esa mocosa no está en casa!! Pero ya verá cuando llegue y se las verá conmigo!!!... ya esta bueno que siempre haga lo que se le plazca!!!!
Señora… yo
- Ya le dije que no esta aquí!!! Váyase!! – dijo eso y dio un portazo… - MALDIGO EL DIA QUE CONCEBI A ESA NIÑA, SEUNGJO DONDE ANDA TU HERMANA, YA VERAS CUANDO LA AGARRE LO QUE LE VA A PASAR!. – se oían los gritos desde dentro. Donghae sentía que había hecho algo muy malo en ir a meterse a la casa de ella, y más se asustó al oír a la mujer gritar así.
Se quedo allí de pie sin saber exactamente qué hacer, se tocaba la frente, donde podría estar ella. La puerta se volvió abrir cuando salió un muchachito.
- Usted busca a mi noona?
- Eh? Eres hermano de Lee Bom – el chico asiente con la cabeza.
- Porque la busca?
- Verás es muy importante que pueda hablar con ella, tu sabes donde esta? – el chico vuelve asentir con la cabeza.
- SEUNGJO APRESURATE CON EL ENCARGO!! . se oyó gritar a la mujer desde dentro.
El chico tomo de la mano a Donghae y salieron corriendo de ahí.
Corrieron hasta una avenida que daba frente a un parque, al parecer algo se estaba realizando, había mucha gente, el niño lo guió por entre la multitud.
- Que están haciendo – pregunta Donghae curioso.
- Es Domingo Solidario… - contesto el niño.
- Soli...dario? – Donghae estaba encantado con lo que veía, gente donando ropa, haciendo actividades para niños, ancianos, no sabía que había gente que hiciera eso, - y por aquí iremos donde está tu hermana?
- Si, ella está aquí – respondió el niño.
- Aquí? – él inmediatamente alzo la cabeza y comenzó a buscar, por si la veía.
Cuando por fin el niño se detuvo y le indico hacia un grupo de niños; en el medio estaba Lee Bom, a lo que parecía estaba repartiendo dulces o algo por el estilo. El niño se soltó de DongHae y fue corriendo hacía su hermana, ella al verlo lo mira enojada, para luego cambiar la expresión a cariño, le revuelve el cabello y le da de lo que estaba repartiendo.
Para Donghae la escena era asombrosa, no parecía ser la misma causa problemas que conocía, si no otra más distinta, su corazón reaccionaba a cada sonrisa despreocupada que daba. Se veía distinta, se había recogido el cabello en una cola de caballo. Se puso aún más nervioso al ver que el niño apuntaba hacia donde él estaba y la sonrisa de ella se desvaneció, para dar a una cara de incredulidad y asombro. Donghae la saludo de lejos con la mano y se encamino a su encuentro.
- Al fin te encuentro Lee Bom!- dice finalmente.
- Profesor Lee que hace aquí? – eventualmente ella estaba nerviosa, se sentía feliz al verla reaccionar de esa manera y encontraba que se veía muy linda con sus expresiones de nerviosismo.
- Vine porque quiero hablar contigo, y esta vez no te me arrancas – le dice sonriéndole ampliamente.
- Unnie~ quien es este Ajhussi?..
- Qué? Ajhussi? – dice riendo a la niña – acaso me veo como uno? – Donghae se pone a la altura de la niña. Y Ella suelta una risita coqueta escondiéndose detrás de Lee Bom.
- Ajhussi es guapo.
- Hey…hey.. nada de ajhussi… las niñas lindas como tu deben decirme Oppa!!.. eh?... dilo…
- O…
- Oppa!... – dice él sin dejar de sonreír.
- Oppa!.- grita esta!
- Bien así me gusta!!.... – él vuelve a levantarse mirando a Lee Bom – bien, podemos hablar. Ella mira a los niños y luego le sonríe… haciendo que el corazón se le acelere por el repentino cambio.
- Niños!! El Ahjussi de aquí viene a verlos, y regístrenle los bolsillos porque les trae dulces!!!!!- dice con malicia.
- Que??.... no … yo… no – pero antes de poder alejarse ya estaba rodeado de niños hurgueteando en sus bolsillos. – Hey no se vale! Lee Bom ayúdame!!!.... hey!! No cuidado donde pones la mano niña!!
Lee Bom reía y aplaudía viendo la escena, y Donghae no sabía si reír o avergonzarse por estar siendo acosado por niños.
- Yah!! Déjenlo! Los dulces los llevo a el stand! Vayan por ellos!!!! – dice ella aún riendo. – Ve tú también SeungJo…
Cuando Donghae es por fin liberado de las manos infantiles vuelve a incorporarse sacudiéndose los pantalones. Al final ambos dan un paseo por el parque.
- Así que haces obras de caridad eh?...
- Si menciona algo de esto en la escuela está muerto.
- Calma… no diré nada… pero me sorprendes Lee Bom.
- En serio!!!! – dice ella entusiasmada – o sea… ejem… bien gracias – Ella se toma el cabello para jugar con el, Donghae se queda “pegado” viendo la acción.
- Profesor…!
- Eh?? Si que…
- Le pregunté sobre que quiere hablar conmigo?
- Ah! eso… así que me escucharas? – ella encoge los hombros y mira al cielo, en la mente de Donghae, no podía creer que ella fuera de secundaria.
- Ya está aquí, que puedo hacer! – le dice esta sonriéndole nerviosa. Otra vez el corazón se le acelera con tal sonrisa
- Mira, primero quiero disculparme por lo del otro día, no me dejaste explicarme…
- No tiene que darme explicaciones es comprensible que piense así
- La verdad es que no lo pienso así! Yo mira Lee Bom lo que quería decir es que…
- En serio profesor no se esfuerce!... – Donghae se para frente a ella y la sujeta de los hombros.
- Lee Bom lo que en realidad pienso es que en la escuela se siente tan vacio si tú no estás…
Ambos se quedaron viendo, ella sorprendida y él sintiendo como los colores le subían al rostro por decir palabras que sonaban a cualquier cosa menos lo que intentaba decir. Ambos carraspearon y él la soltó para seguir caminando.
- Bueno, si es verdad que está tranquilo, pero eso hace que todo sea muy aburrido… yo…
- Si entiendo gracias, y no debí precipitarme, perdóneme – dijo está mirando hacia cualquier parte.
- Ejem… bueno lo otro es que quiero oír tu versión de la historia, me siento mal por no haberte escuchado…
- Y que gana con eso?
- Disculpa?
- Dígame que saca con que le diga mi versión, si no va creerme y sobre todo… no va hacer que me levanten la suspensión!
- Pero… - ella tenía razón, no le levantaría el castigo, y no estaba seguro si le creería. – Aun así quiero saberlo…
- Bien…esto es lo que pasó, quise mejorar, se me dio la oportunidad, le pedí a KyuHyun que me asesorara, así que nos reuníamos en la biblioteca en la hora de almuerzo, y entonces a medida que hacia algo él me corregía o no, quedamos en que nadie sabría de nuestras reuniones así que por eso imagino que negó eso el otro día, intente varias veces de ir a verlo para mostrarle mi trabajo pero vera… siempre estaba ocupado, al final cuando llego el día, misteriosamente Hanbyul metió sus manos de lagartija y paf! Mágicamente me suspendieron!
- Espera, espera! Que tiene que ver aquí Hanbyul? – dice este incrédulo
- Está más claro que el agua!, ella se ofreció para entregar los trabajos!!! Ella puso sus manos en el mío! Y a la hora me suspenden!!! Es como sumar peras con manzanas!!
- Lee Bom!, eso es una acusación muy grave! Sé que tu y Hanbyul se odian pero no es para acusarla de algo así, ella no haría algo como eso…
- Que ingenuo es usted profesor… se nota que no nos conoce!!! Y ve! De que sirvió decirle si no me creería!
- Pero como esperas que crea en algo como eso! – sin darse cuenta Donghae comenzaba alterarse.
- Entonces a que vino eh?, le dije que no me creería!!! A que vino? A refregarme en la cara que nadie confía en mí? O que por ser suspendida no tengo posibilidades de ir a una universidad? Eso? – ahora ella se estaba alterando y la cara la tenia roja de rabia, Donghae se calmó, no sacaba nada con discutir.
- Lee Bom, quiero que sepas que no todo está perdido, una vez que vuelvas a la escuela puedes volver a intentarlo, aun se puede…
- Que le hace pensar que volveré a la escuela?
- Que estás diciendo??
- Profesor… yo ya perdí un año!!...eh sido suspendida unas 17 veces y expulsada de casi todas las escuelas de la zona…. Ya no hay más oportunidades para mí! No volveré. – Lee Bom se volteo para taparse la cara, Donghae entendió que estaba llorando.
Se sintió mal, su intención no era hacerla llorar, que podría hacer para ayudarla, quería protegerla, no verla llorar más porque eso lo hacía sentirse triste también. Se acerco a ella para tratar de voltearla pero ella se negó… volvió a intentarlo acercándose más y cuando logro voltearla la rodeo con sus brazos, Lee Bom se agarro de la camisa del profesor y seguía llorando. Él apoyo su mentón sobre su cabeza. Le dolía verla así, pero una parte de él estaba eufórico, porque por fin logro hacer lo que quería hace tanto tiempo, abrazarla.
Lee Bom, esperaba sentada en un banco mientras Donghae había ido a comprar, ella tenía la chaqueta del profesor puesta. Se abrigo mas en ella y cerró los ojos para sentir el aroma de él. Donghae la había visto desde lejos, y tuvo que esperar unos minutos para disimular la sonrisa y el rubor. Cuando se acerco a ella, le puso una lata de té en su mejilla, asustándola, luego se sentó a su lado abriendo otra lata.
- Gracias por el té. – dijo ella calentándose las manos.
- Comienza hacer frío, no deberías andar tan desabrigada.
- Es la segunda vez que me presta su chaqueta – dice ella sonriendo avergonzada. Donghae dudo un momento cuando recordó cual había sido la primera vez, el día que cayeron a la pileta, recordar la escena lo puso nervioso y bebió un sorbo de su té.
- Ya debería volver a mi casa… es tarde. Todo en el parque se fueron.
- Cierto el tiempo voló rápido..
Hubo un largo minuto de silencio, ambos estaban un tanto nerviosos. Aunque Donghae se sentía de lo más relajado al lado de ella, le daba un sorbo a su té cada vez que tenía un pensamiento poco ético.
- Por qué… - él comenzó hablar.
- Eh? Dijo algo – ella se había soltado recién la cola de caballo y el pelo cayo con gracia sobre sus hombros, Donghae tuvo que apretar su lata y beber todo lo que quedaba en ella.
- Solo quería saber… por qué tú y Hanbyul se odian tanto.
- Eso es fácil! No nos llevamos bien, es nuestra naturaleza!
- Si pero… por lo que eh oído este año la enemistad de ustedes se intensifico… por qué? – él por fin se atrevía a mirarla a la cara.
- Profesor… en verdad quiere que le responda eso??... – Ella lo miró y se acerco a él tomándolo desprevenido..
- Eh… si…
- Usted no es tonto verdad? – dijo ella alejándose y mirando su lata de té.
- No… creo que no soy un tonto…
- Bien…
- Bien… no me digas…
- Claro, no le voy a decir algo que ya sabe…
- Claro… - Donghae mira hacia otro lado nervioso… un tanto confundido por la conversación. Jugando con su lata vacía. Pero ella mismo lo dijo… no era tonto.
Donghae, la miraba de reojo, estaba disfrutando de la compañía de ella, sin presiones, sin escuela, ella siempre lo sorprendía con algo nuevo. Muchas cosas daban vuelta en su mente cuando sintió que ella se apoyaba en su hombro.
- Profesor Lee… gracias. – le dijo ella casi susurrando
Donghae sentía como se ruborizaba, y le alegraba que ella no lo estuviera mirando, se río de sí mismo y del momento prácticamente perfecto en que estaba. Podía verle el perfil, bastaba con levantar su mano para acariciarle el rostro.
Antes que pudiera hacerlo, llega corriendo SeungJo
- Noona!!! Noona!!!, mamá esta buscándote debemos irnos!!
Ella inmediatamente se levanta, quitándose la chaqueta y bebiéndose todo el té.
- Bien! Profesor!! Debo irme…. Y bueno… eso… - ella le sonríe tímidamente y se aleja al lado de su hermano.
- Volverás cierto??, piénsalo bien!!.. te puedo ayudar!!! – le grita este antes que la pierda de vista.
Al final de todo, si fue una buena idea haber ido a su casa, porque así pasó uno de los mejores domingos que no había tenido en mucho tiempo.
Fin capitulo 7
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